¿Cómo empezar a entrenar? Guía Rápida 2024

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¿Por qué es Importante saber cómo empezar a entrenar?

Comenzar a entrenar no solo mejora nuestra apariencia física, sino que tiene un impacto profundo en nuestra salud general y bienestar mental. El ejercicio regular ayuda a reducir el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes, la hipertensión y problemas cardíacos. Además, incrementa la energía diaria, mejora la calidad del sueño y disminuye los niveles de estrés.

Para aquellos que nunca han hecho ejercicio, el primer paso puede parecer desafiante. Sin embargo, entender los múltiples beneficios que ofrece el entrenamiento puede ser un gran motivador. Más allá de la pérdida de peso o el aumento de masa muscular, el ejercicio tiene efectos positivos en la salud mental, promoviendo la liberación de endorfinas, que son las hormonas responsables de la sensación de felicidad.

Entrenar regularmente también te ayuda a desarrollar disciplina y constancia, cualidades que se reflejan en otras áreas de la vida. Así que, si te preguntas si vale la pena comenzar a entrenar, la respuesta es un rotundo sí. ¡Los beneficios van mucho más allá de lo físico!

Estableciendo Objetivos Realistas

persona escalando una montaña y llegando a la cima

Uno de los errores más comunes al empezar a entrenar es establecer objetivos poco realistas. Muchas personas se proponen metas demasiado ambiciosas y, al no ver resultados inmediatos, se frustran y abandonan. Por eso, es fundamental establecer objetivos alcanzables y específicos.

Por ejemplo, si no has hecho ejercicio antes, un buen objetivo podría ser realizar 30 minutos de actividad física tres veces por semana. A medida que te sientas más cómodo, puedes ir incrementando la frecuencia y duración de tus entrenamientos.

Establecer metas a corto plazo, como mejorar tu resistencia cardiovascular o aprender a hacer ciertos ejercicios correctamente, también es una excelente forma de mantener la motivación. Recuerda, el progreso constante y sostenido es mejor que buscar resultados rápidos y efímeros. ¡Ten paciencia y disfruta del proceso!

Elegir el tipo de entrenamiento ideal para ti

personas realizando flexiones en grupo y descubriendo como empezar a entrenar

El mundo del fitness ofrece una variedad de opciones de entrenamiento, desde ejercicios cardiovasculares hasta entrenamiento de fuerza y actividades de flexibilidad. La clave es encontrar el tipo de ejercicio que disfrutes y que se adapte a tus objetivos y capacidades.

Entrenamiento de cardio

Las actividades cardiovasculares como caminar, correr, nadar o andar en bicicleta son excelentes para mejorar la resistencia y quemar calorías. Además, son perfectas para principiantes porque no requieren equipo especializado y se pueden adaptar fácilmente a diferentes niveles de condición física.

Entrenamiento de fuerza

El entrenamiento de fuerza es fundamental para desarrollar y mantener la masa muscular. Si eres nuevo en el entrenamiento de fuerza, puedes empezar con ejercicios básicos como sentadillas, flexiones y levantamiento de pesas ligeras. Estos ejercicios te ayudarán a fortalecer los músculos, mejorar la postura y aumentar el metabolismo. A la vez, te recomiendo que experimentes disciplinas como el Crossfit o el Cross Training donde podrás desempeñar otro tipo de entrenamiento y disfrutar de una buena compañía a la vez que haces deporte.

Entrenamiento de flexibilidad

El entrenamiento de flexibilidad, como el yoga o los estiramientos, mejora el rango de movimiento y ayuda a prevenir lesiones. Dedicar unos minutos al día a estirar o practicar yoga puede hacer una gran diferencia en cómo te sientes físicamente y en tu rendimiento en otros tipos de ejercicios.

Explorar diferentes tipos de entrenamientos como el ejercicio funcional u otros y encontrar el que más disfrutes te ayudará a mantenerte motivado y a incorporar el ejercicio como parte de tu rutina diaria.

Preparación básica antes de comenzar

material de ejercicio para principiantes

Antes de empezar a entrenar, es importante contar con el equipo adecuado y seguir algunos consejos básicos para evitar lesiones y maximizar el rendimiento.

Equipamiento básico para el deporte

No necesitas un gimnasio lleno de máquinas para empezar. Con un par de zapatillas deportivas adecuadas, ropa cómoda y quizás una esterilla para ejercicios en el suelo, es suficiente. Si decides probar el entrenamiento de fuerza, unas mancuernas o bandas elásticas pueden ser de gran ayuda para realizar ejercicios variados y efectivos.

Hidratación y alimentación

Mantente bien hidratado antes, durante y después de tus entrenamientos. El agua es esencial para el buen funcionamiento de tus músculos y órganos. En cuanto a la alimentación, trata de consumir alimentos ricos en nutrientes que te proporcionen energía suficiente para rendir en tus ejercicios. Un snack ligero, como una pieza de fruta o un puñado de nueces, puede ser ideal antes de entrenar.

Calentamiento y enfriamiento

Nunca te saltes el calentamiento. Unos minutos de ejercicios suaves como trotar, saltar o estirar te prepararán para la actividad física y reducirán el riesgo de lesiones. Al terminar, realiza estiramientos para ayudar a tus músculos a recuperarse y evitar molestias posteriores.

Rutinas de ejercicio para principiantes

rutina de ejercicios para principiantes

Al empezar, es recomendable seguir un plan de entrenamiento que combine ejercicios de diferentes tipos para trabajar todo el cuerpo de manera equilibrada. Aquí tienes un ejemplo de rutina semanal para principiantes:

Día 1: Cardio y Flexibilidad

  • 20 minutos de caminata rápida.
  • 10 minutos de estiramientos, enfocados en piernas y espalda.

Día 2: Fuerza (parte superior)

  • 3 series de 12 repeticiones de flexiones.
  • 3 series de 15 repeticiones de levantamiento de pesas ligeras (bíceps y hombros).
  • 3 series de 12 repeticiones de planchas con rotación.

Día 3: Descanso o actividad ligera

  • Yoga suave o una caminata relajante.

Día 4: Cardio y Fuerza (parte inferior)

  • 20 minutos de bicicleta estática o elíptica.
  • 3 series de 15 sentadillas.
  • 3 series de 12 estocadas por pierna.

Día 5: Fuerza y Flexibilidad

  • 3 series de 15 abdominales.
  • 3 series de 15 puentes de glúteos.
  • 10 minutos de estiramientos enfocados en abdomen y cadera.

Día 6: Cardio de Intensidad Moderada

  • 30 minutos de trote suave o natación.

Día 7: Descanso y Recuperación

  • Día libre o estiramientos ligeros.

Recuerda que esta es solo una guía básica. Es importante escuchar a tu cuerpo y adaptar la rutina a tus necesidades y nivel de condición física.

Errores comunes al empezar a entrenar y cómo evitarlos

errores en el entrenamiento

Cuando se inicia en el mundo del entrenamiento, es fácil caer en ciertos errores que pueden afectar el progreso o incluso causar lesiones. Aquí te detallo algunos de los errores más comunes y cómo evitarlos:

1. Expectativas irrealistas

Uno de los mayores obstáculos al comenzar a entrenar es esperar resultados rápidos. Es importante entender que la transformación física lleva tiempo y constancia. Para evitar la frustración, establece metas realistas y celebra cada pequeño logro, como completar tu primera semana de entrenamientos o sentirte con más energía.

2. Falta de calentamiento y enfriamiento

Muchas personas omiten el calentamiento antes de entrenar y los estiramientos posteriores. Estos pasos son esenciales para preparar los músculos y articulaciones, prevenir lesiones y reducir el dolor muscular. Un calentamiento efectivo debería durar entre 5 y 10 minutos e incluir movimientos suaves que eleven la frecuencia cardíaca.

3. Sobreentrenamiento

Comenzar con demasiada intensidad puede provocar agotamiento y lesiones. El cuerpo necesita tiempo para adaptarse a la nueva actividad física. Si te exiges demasiado desde el principio, podrías experimentar dolor, fatiga excesiva y pérdida de motivación. Es fundamental empezar despacio, especialmente si no tienes experiencia previa.

4. Ignorar la técnica correcta

La ejecución incorrecta de los ejercicios no solo limita los beneficios del entrenamiento, sino que también aumenta el riesgo de lesiones. Si no estás seguro de cómo realizar un ejercicio, busca la ayuda de un profesional o consulta recursos confiables que te expliquen la técnica adecuada.

5. Fijarse solo en el peso corporal

Aunque perder peso puede ser un objetivo común, es importante recordar que el progreso no siempre se refleja en la báscula. Factores como el aumento de masa muscular y la pérdida de grasa pueden equilibrarse, haciendo que el peso no cambie mucho. Presta atención a otros indicadores, como el aumento de energía, la mejora en el estado de ánimo y cómo te queda la ropa.

Evitar estos errores te permitirá disfrutar más de tu experiencia de entrenamiento y mantenerte motivado a largo plazo. La clave está en escuchar a tu cuerpo y progresar de manera segura y constante.

Cómo mantener la motivación y hacer del entrenamiento un hábito

motivacion en el deporte

Mantener la motivación al iniciar un nuevo plan de ejercicios puede ser un desafío, especialmente cuando la novedad inicial se desvanece. Aquí te dejo algunas estrategias para hacer del entrenamiento un hábito duradero:

1. Encuentra un Entrenamiento que Disfrutes

El ejercicio no debería sentirse como una obligación. Explora diferentes tipos de actividades físicas hasta encontrar la que realmente disfrutes, ya sea bailar, practicar yoga, levantar pesas o simplemente salir a caminar. Cuando te diviertes entrenando, es mucho más fácil mantener la constancia.

2. Establece un Horario Regular

Planifica tus entrenamientos como harías con cualquier otra actividad importante. Establecer un horario fijo te ayudará a integrarlos en tu rutina diaria y evitará que los dejes de lado. Si tiendes a estar ocupado durante el día, considera entrenar temprano por la mañana o en la noche.

3. Entrena con un Amigo o Grupo

Hacer ejercicio con amigos o en grupo no solo lo hace más agradable, sino que también aumenta tu compromiso. Es más difícil faltar a un entrenamiento si sabes que alguien te está esperando. Además, compartir tus objetivos con otros puede brindarte apoyo y motivación extra.

4. Varía tu Rutina

Hacer siempre lo mismo puede volverse aburrido y estancarte en tu progreso. Introduce variedad en tu entrenamiento, cambiando los ejercicios, la intensidad o el tipo de actividad. No solo mantendrás la motivación, sino que también retarás a tu cuerpo de nuevas maneras, promoviendo mejores resultados.

5. Registra tu Progreso

Llevar un registro de tus entrenamientos te ayudará a ver cómo mejoras con el tiempo. Anota los ejercicios, repeticiones, peso utilizado y cómo te sientes después de cada sesión. Revisar estos registros cuando te sientas desmotivado te recordará cuánto has avanzado.

6. Recompénsate

Establece pequeñas recompensas por alcanzar tus objetivos. Puede ser una comida especial, una nueva prenda deportiva o un día de descanso extra. Estas recompensas actúan como un incentivo para seguir esforzándote y alcanzar tus metas.

Mantener la motivación puede ser difícil al principio, pero con estas estrategias, estarás en el camino correcto para convertir el entrenamiento en un hábito saludable y duradero.

La importancia del descanso y la recuperación en el entrenamiento

descanso en el entrenamiento

El descanso es una parte fundamental del entrenamiento, y su importancia no debe subestimarse. Sin un descanso adecuado, el cuerpo no tiene tiempo para recuperarse y adaptarse, lo que puede conducir al agotamiento y a un mayor riesgo de lesiones.

1. Por qué es necesario descansar

Durante el ejercicio, los músculos sufren pequeñas roturas que, con el tiempo, se reparan y fortalecen. Este proceso de reparación ocurre principalmente durante el descanso. Por ello, es crucial permitir que los músculos se recuperen, especialmente si estás comenzando a entrenar y tu cuerpo no está acostumbrado a la actividad física regular.

2. Cómo incorporar el descanso en tu plan de entrenamiento

El descanso no significa necesariamente no hacer nada. Los días de descanso activo, como una caminata suave, yoga o estiramientos, pueden ayudar a reducir el dolor muscular y mejorar la circulación sin sobrecargar el cuerpo. Planifica al menos uno o dos días de descanso a la semana para permitir una recuperación adecuada.

3. Señales de que necesitas descansar

Escuchar a tu cuerpo es clave para prevenir el sobreentrenamiento. Si experimentas fatiga extrema, falta de motivación, irritabilidad o dolor persistente, es una señal de que necesitas más tiempo de recuperación. Tomarte uno o dos días de descanso adicional puede marcar una gran diferencia en tu rendimiento y bienestar general.

4. Técnicas de recuperación

Incluir técnicas de recuperación como el masaje, el uso de rodillos de espuma o la terapia de calor y frío puede acelerar la recuperación muscular. Además, asegúrate de dormir lo suficiente cada noche, ya que el sueño juega un papel crucial en la reparación y recuperación del cuerpo.

Incorporar el descanso y la recuperación en tu rutina de entrenamiento te ayudará a prevenir el agotamiento, mejorar tu rendimiento y alcanzar tus objetivos de manera más efectiva.

Planificación a largo plazo

entrenamiento-en-el-largo-plazo

Una vez que te hayas acostumbrado a tu rutina de entrenamiento inicial, es hora de pensar en cómo puedes progresar y llevar tu entrenamiento al siguiente nivel. Aquí te explico cómo hacerlo de manera segura y efectiva:

1. Aumenta gradualmente la intensidad

Incrementa la intensidad de tu entrenamiento de manera gradual para evitar lesiones. Puedes hacerlo añadiendo más repeticiones, aumentando el peso que levantas o reduciendo los períodos de descanso entre ejercicios. El principio de sobrecarga progresiva es clave para seguir avanzando.

2. Cambia de rutina regularmente

Cambiar tu rutina cada 4-6 semanas evitará que tu cuerpo se acostumbre al mismo estímulo, lo que puede conducir a un estancamiento. Introduce nuevos ejercicios o cambia el orden de los que ya haces. Esto no solo mantendrá las cosas interesantes, sino que también desafiará a tus músculos de nuevas formas.

3. Establece nuevas metas

A medida que progreses, tus objetivos iniciales cambiarán. Tal vez comiences a querer correr una mayor distancia, levantar más peso o incluso participar en una carrera o evento deportivo. Establecer nuevas metas te ayudará a mantener la motivación y te dará algo nuevo por lo cual esforzarte.

4. Busca asesoría profesional

Si sientes que has alcanzado un punto muerto o necesitas ayuda para avanzar, considera trabajar con un entrenador personal. Un profesional puede proporcionarte un plan de entrenamiento personalizado y asegurarse de que estés ejecutando los ejercicios correctamente.

5. Escucha a tu cuerpo

El progreso no siempre es lineal, y es normal tener altibajos. No te desanimes si no avanzas tan rápido como esperabas. Escucha a tu cuerpo y respétalo; a veces, un descanso adicional o un cambio en la rutina es todo lo que necesitas para retomar el camino.

Progresar en tu entrenamiento es un proceso continuo que requiere paciencia, compromiso y una mentalidad abierta para adaptarse a los cambios.

¡Da el primer paso y comienza hoy!

Empezar a entrenar es una de las mejores decisiones que puedes tomar para mejorar tu salud y bienestar. Al seguir los consejos de este artículo, estarás mejor preparado para afrontar los desafíos iniciales y construir una rutina de ejercicio sólida y efectiva. Te recomendamos al 100% que acudas a un lugar para entrenar y qeu tus compañeros te ayuden a darlo todo en cada uno de tus entrenamientos. Para ello, te esperamos en el mejor centro de entrenamiento funcional de Tenerife, donde practicamos discplinas como cross training o crossfit que hará que progreses y te lo pases en grande. ¡Te esperamos en BeMe Training!

Recuerda que no hay un camino único hacia el éxito. Encuentra el tipo de entrenamiento que te guste, establece objetivos realistas y, sobre todo, disfruta del proceso. Los beneficios del ejercicio van mucho más allá de la apariencia física; mejoran tu energía, estado de ánimo y calidad de vida en general.

¡Da el primer paso hoy y comienza tu viaje hacia una vida más activa y saludable!

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